Medellín: ¿la ‘meca’ del reguetón?

Si a María Clara Ramírez le preguntaran por su género musical favorito, probablemente su primera respuesta no sería el reguetón. Sin embargo, durante los últimos años, ha estado sumergida en una nueva realidad: la internacionalización de Medellín y su florecimiento de su industria musical urbana.

Hasta 2019 fue directora de la Agencia de Educación Superior de Medellín - Sapiencia, donde dirigió el plan de educación superior de la ciudad a través de los diferentes fondos. Durante dos años en este rol conoció a diferentes actores culturales, empresarios y jóvenes que de alguna forma se relacionaban con la educación, pero también con la música urbana.

Entre ellos, conoció a quienes hoy son sus socios: Alexander Sánchez y José María Bernal, dos expertos de la movida cultural y audiovisual en la ciudad.

Los tres tenían ideas en común acerca de la cantidad y calidad de talento nato que vivía en las comunas o barrios periféricos de la ciudad, en la cantidad de artistas internacionales que venían a grabar sus videos musicales, como los puertorriqueños Nicky Jam y Daddy Yankee y en que Medellín se estaba convirtiendo en la ‘meca’ del reguetón.

Innegablemente la cuna del reguetón es Puerto Rico, pero en Medellín se da una apropiación de este género por parte de los jóvenes de la ciudad y esto hace parte del auge internacional que tienen figuras como Ovy on the drums, Maluma, J Balvin o Karol G.

Las conversaciones derivaron en sueños y los sueños en planes: se propusieron consolidar la industria musical en Medellín como una de las más competitivas y atractivas del mundo. ¿Cómo hacerlo? veían que quienes estaban en la industria, aún incipiente, eran compositores, productores y artistas empíricos ¿Cómo formarlos y catapultar el desarrollo artístico de la región?

Tenían tres grandes retos: acortar la brecha entre jóvenes artistas y empresariado, ampliar la oferta de espacios para crear música urbana en la ciudad y hablar seriamente de reguetón como la ventaja competitiva de Medellín en una sociedad profundamente conservadora.

«Si los más talentosos música, tuvieran el apoyo que no tuvieron quienes hoy son grandes en la música, podríamos construir entre todos una cadena de gratitud y de progreso en la ciudad» , dice María Clara.

Alexander, José María y María Clara decidieron tener esta conversación con diferentes entidades para sumar voluntades. Hablaron con empresarios, fundaciones y corporaciones culturales para que participaran en esta apuesta competitiva de la ciudad.

La suma de voluntades dio origen a Descomunal, un proyecto que desde el 2021 reconoce y cultiva el talento de los jóvenes de comunas periféricas para construir una verdadera industria musical urbana.

Descomunal espera que a 2025 haya entregado diez mil becas, producir cuatro álbumes musicales en sus estudios de los barrios Castilla y el Doce de octubre que sirvan de trampolín para los talentos locales que florecen en nuestro Valle.

La ANDI, Comfama, la Fundación Sofía Pérez de Soto y Samuel Bluman sumaron voluntades para la creación de Descomunal.

#Welcome a más espacios para formar y reconocer la música urbana y las industrias creativas.