Desarrollo rural para un agro 5.0

El origen

La Fundación nació con el propósito de que las familias campesinas tuvieran acceso a la educación, a través de cartillas, asesorías y algunos cursos para mejorar sus formas y prácticas de cultivo, riego y recolección; además, aprender cómo cuidar sus animales. 

Hoy

Al ver que este acompañamiento no era suficiente, decidieron hacer las cosas distinto y llevarlo a otro nivel, así se comprometieron con la tecnificación de la labor del campo. Desde el 2006, la Fundación ofrece becas en ciencias de la salud, administración de empresas, ciencias administrativas y otras áreas de estudio, dirigidas a campesinos. Con estas becas cubren su matrícula y gastos de manutención.

Hasta el 2022 la Fundación apoyó a más de 2.044 estudiantes en 26 municipios de 21 departamentos con un índice de deserción de apenas el 2,1%.

Además, certifica el conocimiento empírico de campesinos en áreas como emprendimiento, finanzas básicas y pedagogía.  

Para el 2063

En el futuro, la modernización del campo será uno de los principales temas de conversación, especialmente todo lo que haga más fácil y eficiente la producción. Por ejemplo, los sistemas de riego monitoreados desde una aplicación móvil o la garantía de poder conectarse a internet desde cualquier vereda del país. 

12% de los programas que apoya con becas ya están enfocados en ciencias de datos e informática. 

El emprendimiento es una de las alternativas de desarrollo y sostenibilidad en las zonas rurales. Por eso, la Fundación acompaña a familias productoras de café, panela o cacao en la comercialización de sus productos en almacenes de grandes superficies. Espera hacerlo con miles de familias en los próximo 40 años.

Gracias a esta evolución, la Fundación Aurelio Llano Posada ha podido resguardar su propósito: transformar el campo con educación.