¿Cuál es mi aporte al sector social?

Ser conscientes de su impacto cotidiano

Lucía García Giraldo* nos propone pensar en un día típico. Cuando nos levantamos, tal vez prendemos la radio para escuchar noticias en la emisora universitaria, la cultural o alguna comunitaria.  Seguramente algunas de esas son organizaciones de la sociedad civil.

Al bañarnos, detrás de la disponibilidad de los servicios públicos como el agua o la electricidad, están numerosas organizaciones sociales, desde la fundación de la empresa que los provee, hasta las corporaciones rurales que cuidan los nacimientos de agua.

En el desayuno ¿cuántos de los alimentos que tomamos provienen de una cooperativa o una asociación de productores campesinos?

Llevamos apenas una hora de levantados y ya tenemos un rol protagónico de las organizaciones sociales en nuestro bienestar. 

*Lucía García Giraldo, directora del programa SUMA Social.

Identificar las OSC para conocer mejor su labor

Irene Gaviria*, nos explica que las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) se dedican a temas muy diversos, pero entre ellas tienen en común que son sin ánimo de lucro, no son entidades estatales y tampoco son empresas del sector privado.

En Antioquia tenemos alrededor de 9.000 organizaciones de la sociedad civil y las hay de todas las causas: por la infancia, por los adultos mayores, por las poblaciones vulnerables, por los animales, por el medio ambiente, por la vivienda, por el empleo, por las oportunidades para cerrar brechas, por la vida en la ciudad, por la vida en el campo, para la educación, la cultura, el arte, el deporte, la salud, la libertad de expresión, el control social a los gobiernos, la promoción de las ciudadanías, la libertad religiosa, ¡en fin!

*Irene Gaviria, Suma Social

Cinco acciones concretas para apoyarlas

Para María Luisa Zapata*, las organizaciones sociales son una oportunidad increíble para conectarnos con nuestro propósito porque sus iniciativas generan valor para sus comunidades. Tenemos, al menos, cinco formas de conectarnos con causas en las que se vea materializado nuestro propósito.

1. Ser voluntario o donar tiempo: podemos ofrecer servicios o nuestro trabajo de manera voluntaria, sin recibir remuneración económica a cambio.  

2. Conectar con aliados: con nuestro conocimiento, podemos conectar el interés de alguna organización social con otras que trabajen en áreas compatibles, empresas, plataformas o grupos de personas. 

3. Promocionar su trabajo en tus redes: todos tenemos un nivel de incidencia en redes sociales con nuestros círculos más cercanos o comunidades digitales. Podemos compartir con ellos el trabajo que admiramos y que nos inspira de las organizaciones sociales.  

4. Conocerlos: podemos tomarnos el tiempo de buscar por internet a esa organización social que nos interesa, conocer sus informes o publicaciones y asistir a sus eventos o multiplica su mensaje.

5. Donar dinero a la causa: también podemos destinar un poco de nuestros recursos a las organizaciones sin ánimo de lucro que se dedican a cuidar de otros, del planeta, del futuro común.  

 *María Luisa Zapata, responsable Gerencia Social de Comfama.